COMUNICADO DE RECTORIA
La Rectoría de la Universidad
del Valle quiere expresar su profunda preocupación por el desarrollo
de las actividades sindicales de protesta por la expedición del Decreto
1919, que suprimió las prestaciones extralegales de los empleados
públicos de la Universidad.
La Dirección Universitaria ha sido conciente desde el primer momento
del impacto que dicha medida tiene en los presupuestos familiares y ha estado
abierta a la consideración de alternativas legales que lo atenúen.
Pero quiere hacer claridad sobre las limitaciones que tiene al respecto.
No es posible exceptuar a la Universidad de la aplicación del Decreto
1919, lo cual excedería los límites de la autonomía
universitaria definidos por sentencia de la Corte Constitucional. No es posible
establecer un mecanismo general y automático de compensación
del ingreso perdido a través de una prima o una bonificación,
por estar prohibido por la ley. No es posible reajustar la escala salarial
en un porcentaje determinado, porque constituiría un aumento irregular
de salario.
Pero si es posible estudiar mecanismos legales que mejoren el bienestar universitario
y el clima laboral, como la afiliación de la Universidad en una caja
de compensación familiar en las mejores condiciones posibles para
los empleados; el estudio de planes de créditos de vivienda con módicos
intereses; la aceleración del proceso de revisión técnica
de la escala salarial; en fin, el estudio de iniciativas, a las cuales la
Universidad está abierta, que puedan ser llevadas a la aprobación
del Consejo Superior y que en su conjunto hagan menos gravosa la pérdida
de ingresos.
La Dirección Universitaria ha insistido ante Sintraunicol-Cali que
la única vía realmente efectiva para oponerse al Decreto es
la de acudir a los tribunales de justicia competentes y que como ciudadanos
respetuosos de las normas legales deben proceder en consecuencia instaurando
las demandas que consideren apropiadas.
La Dirección Universitaria desea además poner en conocimiento de la comunidad universitaria los siguientes hechos:
Una vez conocida la expedición del Decreto 1919, en Agosto 2 el Rector
de la Universidad del Valle en su calidad de Presidente del Sistema Universitario
Estatal (SUE) convocó una reunión de rectores del SUE, que
se realizó en Bogotá en las instalaciones de la Asociación
Colombiana de Universidades ASCUN. Como resultado de la reunión los
rectores acogieron por unanimidad una comunicación dirigida al Señor
Presidente de la República y a los Ministros de Hacienda y Trabajo,
señalando la inconveniencia y problemas involucrados en la suspensión
de las prestaciones extralegales de los empleados públicos vinculados
a las universidades estatales, solicitándoles excepcionar de la aplicación
del decreto al personal ya vinculado. La comunicación no ha sido respondida.
En desarrollo de las actividades propias del SUE, el Consejo de Rectores
del mismo volvió a debatir el tema en posterior reunión realizada
en Bogotá en el mes de septiembre. En esta oportunidad se acogió
una declaración de defensa de la universidad pública y de nuevo,
se señaló la inconveniencia de afectar a las universidades
estatales con medidas que ponen en peligro su estabilidad y gobernabilidad.
El Rector asistió durante los últimos diez días a citas
concedidas en los Ministerios de Trabajo, Educación y Hacienda, en
las cuales fue atendido por los Viceministros del ramo. Temas centrales de
estas conversaciones fueron entre otros, la solicitud de excepcionar de la
aplicación del Decreto 1919 a los empleados públicos ya vinculados
a las universidades estatales, sin encontrar respuesta positiva a esta propuesta.
De estas actividades y comunicaciones se han enterado por informe del Rector
los miembros de los Consejos Académico y Superior así como
los integrantes de la Junta Directiva de Sintraunicol-Cali.
No han asumido por tanto, el Rector y Directivas de la Universidad una actitud
pasiva frente a un problema que afecta a una proporción importante
de empleados públicos de la Universidad. El hecho de que exista la
obligatoriedad para la Universidad de aplicar el Decreto mientras esté
vigente, no quiere decir que lo haya patrocinado ni solicitado, puesto que
fue expedido por el gobierno central en uso de sus atribuciones constitucionales.
Como consecuencia de la anormalidad académico-administrativa producida
por la asamblea permanente convocada por SINTRAUNICO-CALI, la Universidad
no ha podido cumplir con compromisos relacionados con el desarrollo de su
misión esencial y los estamentos profesoral, estudiantil y administrativo
se han visto notablemente afectados en el cumplimiento de sus actividades.
Así mismo, ante la imposibilidad de entrar a trabajar al edificio
de la Administración Central por los bloqueos y hostigamientos a las
personas por parte del Sindicato, no han podido adelantarse los procesos
de nómina, atención de asuntos legales y otros de vital importancia
para la marcha institucional. El pago de la primera quincena del mes de octubre
se ha afectado y no podrá hacerse hasta tanto se haya abierto el edificio
de Administración y se den las garantías de seguridad y normalidad
necesarias para la totalidad del personal administrativo.
La Dirección Universitaria quiere precisar con toda claridad que la
extensión de la protesta a través de una asamblea permanente
no autorizada, no llevará a la modificación de los criterios
expuestos basados en normas legales vigentes. Al mismo tiempo quiere expresar
que acudirá a todos los recursos legales disponibles para evitar que
por acciones de hecho se impida la marcha normal de la actividad académica
y administrativa.
La comunidad universitaria debe entender que una protesta legítima
en su causa y origen, como resultado de sus acciones Sintraunicol-Cali la
ha convertido en un asunto de orden público cuya respuesta y solución
trasciende la esfera de la Dirección Universitaria.
La Rectoría de la Universidad del Valle invita a la reflexión
sobre el momento crucial que vive la universidad colombiana y el país
entero; sobre la necesidad de estudiar a fondo el tema de la autonomía
universitaria y la manera como la Universidad debe relacionase con el Estado
en nuestro tiempo; sobre la obligación social de encontrar caminos
concertados y pacíficos de solución de nuestros problemas;
sobre la enorme responsabilidad que nos cabe de mantener la Universidad abierta
y funcionando a través de todos los conflictos y las dificultades;
y sobre el derecho de la sociedad a exigir que ello sea así.
OSCAR ROJAS RENTERÍA.
Rector.
Cali, 16 de octubre de 2002.
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